Educar en valores. De 7 a 9 años

La curiosidad que caracteriza a estas edades afectará a su relación con las TIC. Ya no se conformará con el canal de siempre de la tele o con los favoritos manidos del navegador, sino que descubrirá que existen otros campos por explorar, o bien que en Youtube, además de los capítulos de su serie favorita, pueden buscar otros contenidos que llamen su atención.

Cobra una enorme importancia en estos momentos la guía efectiva por parte de los padres de dichas conductas exploratorias, ya que marcarán las bases de las pautas futuras que nuestros hijos seguirán a la hora de enfrentarse al mundo que las TIC pone a sus pies.

La familia es todavía su marco de referencia. Le interesan lo que hacen los chicos mayores y pueden, por imitación, llegar a realizar actividades en Internet no adecuadas a su edad. Les gusta jugar a través de Internet y comienzan a utilizar la mensajería instantánea y las actividades en línea para actividades de ocio o para trabajos educativos.

Los progenitores hemos de apoyar y alabar los avances en el manejo del ordenador y las tareas educativas realizadas por nuestros hijos. Del mismo modo, podemos pedir aclaraciones técnicas y explicaciones de procesos para aprender de ellos, algo que resulta para ellos del todo motivador.

A esta edad se puede empezar a trabajar explícitamente cierto tipo de valores y actitudes. Conviene crear una lista de normas para cumplir, a ser posible negociada, argumentada y razonada. Las normas han de ser claras y sencillas y los niños deben saber que si se sobrepasan los límites se enfrentará a una serie de consecuencias.

Algunos ejemplos de normas pueden ser:

  • No dar datos personales, direcciones, teléfonos ni ningún tipo de información a nadie que haya conocido en la red.
  • El ordenador se utiliza solo por un tiempo limitado.
  • Pedir permiso para comenzar la sesión que, a ser posible, será supervisada por alguno de los padres.

ACTIVIDAD: EL HÉROE NECESITA...


Los seres humanos actuamos para satisfacer nuestras necesidades. De hecho, las necesidades humanas y sus satisfactores son uno de los motores más potentes de la actual sociedad, tan consumista. Los usuarios de las TIC, como nuestros hijos, quieren satisfacer ciertas necesidades. Para educarles en valores hacia esas tecnologías es preciso conocer cuáles son sus necesidades y qué medios se utilizan como satisfactores de las mismas.

Hemos de sentarnos con nuestros hijos a “valorar para qué necesitamos y usamos las TIC”. Solo de este análisis saldrán los verdaderos valores que les aportarán las destrezas y actitudes que les permitan un uso responsable de las tecnologías.

El desarrollo de la actividad es el siguiente:

  1. Los progenitores explicarán a su hijo que el héroe, como las personas normales, tiene ciertas necesidades que tiene que cubrir de diferente forma: teniendo algo, usando algo, haciendo algo, estando en algún sitio o con alguna persona...
  2. Los padres preguntan a su hijo: ¿Qué necesita nuestro héroe para...? La actitud paterna ha de ser abierta, teniendo paciencia y esperando su respuesta del niño. Intentad no anticipar que esto va sobre la necesidad de tener un ordenador o más videojuegos. Poco a poco pueden ir rellenando la matriz con satisfactores y descubrir para qué necesita su hijo las TIC.
  3. Los progenitores darán su opinión y razonarán con su hijo sobre las cosas que satisfacen al héroe. Verán si los recursos tecnológicos son los únicos satisfactores o existen otros alternativos. En caso de no existir, los padres pueden ayudarles a descubrirlos. Por ejemplo: para divertirse, el héroe necesita ¿un videojuego… o jugar? Existe el fútbol, ir al parque, juegos de mesa, etc. Los padres pueden, dando las explicaciones pertinentes, distribuir los tiempos y horarios en los que el héroe utiliza o realiza actividades.

Si algún satisfactor no está disponible en el entorno familiar, se puede intentar solucionar buscando un satisfactor alternativo o un sitio donde el recurso esté disponible, por ejemplo: las bibliotecas públicas disponen de accesos a Internet. El cuadro puede pegarse en la pared junto con el póster del héroe, así los padres y el niño podrán ir organizando la utilización de los medios y comprendiendo para qué necesidades resultan adecuados.

SUGERENCIA: Realiza, a ser posible con tu pareja, tu propia matriz de necesidades y mira qué es lo satisfacen tus necesidades de protección, subsistencia y afecto. Puedes descubrir cosas interesantes que te ayudarán a analizar la relación con tus hijos.

El mundo del marketing y la publicidad tiende a evidenciar, y en ocasiones a exagerar o incluso crear necesidades y a establecer sus productos como los únicos y legítimos satisfactores de dichas necesidades. Es necesario educar a los niños para liberarse de esas imposiciones artificiales y a ser capaces de identificar cuáles son las necesidades básicas reales que tienen y discriminarlas de los deseos.

Qué necesita el héroe para...
  SER TENER HACER ESTAR
...que le quieran?
...aprender más?
...hablar con los demás y ayudar?
...hablar con los demás y ayudar?
...hacer cosas y crear?
...ser un verdadero héroe?